Agarimo es un restaurante de inspiración en la cocina gallega con toque de autor y ubicado en una de las zonas de moda gastro de Madrid, Ponzano. Agarimo significa cariño en gallego y ellos definen su agarimo en respetar el producto y no desperdiciar comida. De hecho en su web explican que “Nuestra carta está elaborada con un claro propósito: alcanzar el desperdicio cero de alimentos. Para ello, reutilizamos las “mermas” de cada una de las elaboraciones, para incorporarlos en el resto de recetas.” El chef al frente es Guille Rivera, gallego y que después de la pandemia pasó por las aulas de Le Cordon Bleu en Madrid y montó su proyecto. Es un restaurante pequeño, con cabida para 20 comensales distribuidos en seis mesas, más cinco puestos en sillas altas en la barra.
Decorado con gusto, moderno y sin mantel (en mis valoraciones un restaurante “bien” sin mantel, nefasta costumbre de los últimos años), pierde puntos. La carta es corta igual que la de vinos, que cuenta con unas 20 referencias, que me ha parecido más caro que en restaurante similares.
Nos preguntaron si tomábamos pan ( 2€ pp), que acompañan con una mantequilla con sabor a pimiento de padrón.
Respecto a la comida, comenzamos con su brioche de pollo asado y salsa tártara . Se ofrecen por unidad y nos recomendaron pedir uno cada uno. Yo hubiera preferido compartir un brioche y pedir otro entrante, para probar otro plato, por ejemplo las croquetas o el buñuelo de zorza. Dicho esto, es un bocado rico, la salsa tártara tiene ralladura de limón, que le da un gusto especial, y encima tiene unas finas patatas paja.
Compartimos dos principales:
Corvina con emulsión de cocido y repollo encurtido. Muy bueno el punto de cocción del pescado, que le daba un gusto estupendo. La arriesgada combinación con el caldo de cocido y el sabor agridulce del encurtido marinaba sorprendentemente bien con el pescado. Un gran plato.
Croca de vaca gallega con puré de apionabo y anís. La croca es un corte de carne popular en Galicia que se extrae de la cadera de la ternera. Es una carne jugosa y tierna que suele consumir en filetes gruesos. Aquí la preparan con un leve pase por la plancha, como si fuera un roast beef. El puré de apionabo , muy rico con una textura suave. No valoro alto este plato porque considero que la cantidad de carne era demasiado escasa y considero que un plato principal debería ser más contundente. Es curioso que en la carta indican que son platos para compartir, no sé por qué motivo, ya que ambos eran raciones más bien pequeñas.
Previo al postre nos ofrecieron dos bocaditos de mousse de melocotón y frambuesa.
De postre elegimos fresas con nata con hierbabuena y helado de chocolate blanco con albahaca. Un buen postre, con una mezcla de sabores muy conseguida.
Con un precio medio de 40-50€ pp creo que es un restaurante recomendable. Lo valoro en cualquier caso con un 7 y volvería sin duda en otra ocasión a probar otros platos, ya que aquí hay mano para la cocina, y con la esperanza de que las raciones sean un poco más generosas.
Agarimo Madrid.
Calle de Bretón de los Herreros, 27
Tel: 649 71 44 90.